martes, 16 de agosto de 2016

Un gigante que vale oro


Una historia más se escribe en el tenis argentino, y esta vez el protagonista es nada más y nada menos que Juan Martin Del Potro. El tandilense de 27 años, logró la medalla de plata, la primera en la historia argentina, tras llegar a la final en los Juegos Olímpicos de Rio 2016.

El argentino se enfrentó con el número 2 del ranking mundial, Andy Murray, por el cual fue derrotado 7-5, 4-6, 6-2 y 7-5 en un partido que duró cuatro horas de juego.

El primer set con un Del Potro que parecía estar cansado y casi sin aire, claro que nada de eso resultó extraño, ya que venía de eliminar a Nadal el día anterior en casi tres horas de juego. Esto no impidió que Delpo no pudiera soltarse y lanzar su derecha para complicar a Murray aunque este se puso 7-5 arriba demostrando que por algo es el número 2 del mundo.

Todo parecía ser que era una final eterna ya que el primer set duró una hora y 15 de juego.

Ya en el segundo tramo,Murray era una pared, intratable, que devolvió absolutamente todo por momentos, pero Juan Martin se llevó el segundo set  6-4 con una derecha paralela de revés y dando pelea.

En el tercer set estaba más que claro que Del Potro quería el Oro y no desperdiciaba ningún error del escocés con una pelota que pasó treinta veces por encima de la red a una velocidad inalcanzable y dejando una gran tenis a todos los espectadores. Pero Andy iba a sacar ventaja y el set quedó 6-2 a favor.

El cuarto set, Del Potro estaba 5-4 arriba en el marcador, contó con dos puntos para el quiebre, pero Murray se levantó en ambos y cuando tuvo su chance, no la desaprovechó. Se llevó el último parcial y el oro en un 7-5.

Luego de haber estado once meses fuera de las canchas, tres operaciones en su muñeca izquierda y hasta queriendo dejar el tenis, La Torre de Tandil demostró que volvió para quedarse, eliminando en la primera ronda al número 1 como lo es Novak Djokovic, luego, fue el turno del portugués Joao Sousa, siguió el japones Taro Daniel, en octavos se enfrentó con el español Roberto Bautista Agut, en la semifinal, nada más ni nada menos, dejó afuera al gran Rafael Nadal y si bien en el último tramo no pudo contra el escocés, quedará en la historia del tenis el esfuerzo que hizo por llegar a esta final, por luchar tanto y representar la bandera argentina en estos Juegos Olímpicos. Afuera quedó el cansancio, el miedo de llegar con las manos vacías pero lo que si quedó es la humildad y el esfuerzo de una medalla de plata que para nosotros vale oro. Solo nos queda decir: ¡Gracias Juan Martin!


No hay comentarios.:

Publicar un comentario